FOLKLORE POR LA VIDA

CIERRE DEL CICLO 2010
“FOLCLORE POR LA VIDA”

Tal como estaba previsto y con la asistencia de un numeroso público, se realizó el sábado por la noche en el Teatro Municipal Brazzola, el cierre del ciclo 2010 del taller “Folclore por la vida” que conduce Hilda Tristán de Arocena.
En la oportunidad y como lo vienen haciendo desde hace varios años, deleitaron a los concurrentes con variedad de danzas como: Gato, Media caña, Huella, Celosa, Ecuador y Fortinera entre otras, a cargo de los siguientes alumnos y alumnas: Martín Gramont, Miguel López, Mariano y Danilo Pintos, Francisco Morales, Luis Arauz, Eduardo Aurifonti, Nicolás Mendizábal, Sebastián Sarracina, Américo Hermida, Oscar Casco, Manuel Ortega, Agustín y Nicolás Sarralde, Marcelo Carrigal y Alejandro Velazco, Candelaria Muguerza, Florencia Chrestía, Milagros Jiménez, Vilma Pérez, Cintia y Ana Huemarán, Jessica Álvarez y Mariana Mendizábal, María Eugenia Materna, Raquel Hermidas, Agustina Santero, Hilda Saralegui, Patricia Vertí, Raquel Morales, Doris Vila, María Heredia, Agustina Chappa, Milagros Pérez, Valentina Bidegain, Margarita Kette Morales, Marie Rivas, Beatriz Quesada, Raquel Igarategui, Susana Mohito, Andrea Lencina, Sofía Pérez, Rosa Martínez, Malena Officialdeguy, Estela Bustingorry, Camila Costa, Brenda René, Victoria Lacoumette, Carina Pintos y Cristina Andrade.
Colaboraron también, Raúl “Cachafáz” Retola y su esposa, Soledad Ortega, Tamara Orellana, y Rocío Velazco.
Sobre el cierre de la exposición folclórica, la Profesora “Tita” Arocena bailó una zamba en compañía de uno de sus alumnos.
La Sra. Hilda “Tita” Tristán de Arocena agradece el apoyo recibido por el desarrollo del reciente espectáculo folclórico presentado en el Teatro Brazzola a las autoridades municipales, a la prensa local, gráfica, radial y televisiva, a los artistas invitados que colaboraron desinteresadamente en este evento.
En tal sentido, y en forma muy especial a Raúl Cachafaz Retola y a su señora Susana, a las cantantes Soledad Ortega, Tamara Orellana y a Rocío Velazco, a la imprenta Ferreti, a María Luján Ortega, a la familia Ortega-Lucero, A Pablo Surdo, Rubén Esain y a todo el personal del teatro y de la Dirección de Cultura.